miércoles, 29 de enero de 2014

COMUNICACIÓN SOBRE LAS DIFERENCIAS SINDICALES EN EL COMITÉ DE EMPRESA


Es evidente que siempre que se tratan temas en común entre personas, y más en el entorno de grupos, se suelen tener puntos de vistas diferentes y en algunos casos pueden degenerar en un conflicto. Esto es lo que está ocurriendo en la situación actual entre las tres secciones sindicales que formamos el Comité de Empresa de VBR.

Creemos que es claro y manifiesto, y ahí todos deberíamos de coincidir, que hasta la finalización del período de negociaciones del último despido colectivo presentado por la empresa, cuya consecuencia fue el despido de los 66 compañeros por parte de VBR, hubo muchos más consensos que discrepancias y que, independientemente de la línea sindical que cada sindicato tiene, la unidad y el acuerdo fueron la tónica general.

Consideramos un logro de este Comité de Empresa el esfuerzo realizado y sostenido en el tiempo para mantener la unidad en momentos especialmente difíciles, con tres convocatorias de huelga, unas negociaciones de convenio durísimas, el despido de cuatro compañeros y, como traca final, aunque no la definitiva (pues sabemos que quedan muchos conflictos en el horizonte que habrá que resolver), el despido colectivo con su período de negociación.

Durante estos dos años en este comité han sido muchos los momentos de tensión… tensión que se sufre más en la sección sindical mayoritaria, puesto que es la que ha de ejercer el liderazgo, la que suele tomar y ejecutar las decisiones (hasta septiembre de manera consensuada), y es la que dirige la línea sindical del Comité de Empresa en todos los foros donde es necesario acudir para exponer nuestra situación e intentar recabar apoyos que nos sirvan en el presente y, más aun, en el futuro inmediato.

Esto es así y debe de ser así, puesto que la situación en el Comité en cuanto a quién es el sindicato mayoritario es lo que ha querido la mayoría de la plantilla en las últimas elecciones sindicales. Asumimos este reto, con nuestros aciertos y nuestras equivocaciones. Y estamos convencidos de que jamás la plantilla ha estado tan informada de las acciones realizadas por este Comité de Empresa.

El desacuerdo actual parte de la demanda colectiva. No vamos a entrar en quién falta a la verdad. Nos parece un diálogo que no conduce a nada beneficioso para la plantilla. Lo que sí se percibió desde esta sección sindical de UGT fue un distanciamiento en cuanto a la implicación necesaria para realizar la demanda colectiva. No sabemos si fue porque la mayoría de los afectados son afiliados a UGT o si consideraron que había que focalizar su acción sindical en la preparación de las demandas individuales de sus escasos afiliados afectados.

El caso es, que la Fundación Laboral de UGT, a través del abogado que lleva la demanda, José Luis García Ramos, intentó contactar en numerosas ocasiones con los abogados de CCOO y USO para unificar criterios en la presentación de la demanda final. Se partía del hecho de que las tres secciones sindicales traerían su borrador de demanda para la reunión previa al registro, que al final se tuvo el día antes de la fecha en que se registró la demanda. Ni USO ni CCOO trajeron borrador alguno a la reunión. Ginés Espinel, en representación de USO, entregó una guía sobre cómo hacer una demanda con los nombres de los miembros del comité. La abogada de CCOO no aportó nada. La reunión duró una hora aproximadamente, reunión sin sustancia ni beneficio. Es cierto que en dicha reunión se quedó que se iba a registrar la demanda de forma conjunta. Pero no se dijo que fuese a ser el lunes.

José Luis García Ramos, como responsable de la demanda decidió entregarla el viernes, 11 de octubre, porque le preocupaban los plazos. Debido a la premura, a media mañana se llamó a los delegados sindicales de USO y CCOO para que estuvieran en la sede de UGT sobre las 13:00 para firmar la demanda. Recordar que ese día fue cuando nos concentramos ante la sede del PP de Andalucía y la Oficina Consular de EEUU.

Ambas secciones sindicales dijeron que iban a llamar para confirmar la asistencia. Ninguno contestaron y la demanda se entregó ese día a petición de José Luis y con la firma de la sección sindical de UGT para tener el apoyo de un abogado del sindicato ya que no los iba a tener de las otras secciones sindicales.
Una demanda y más de la importancia de ésta, no se puede registrar si no se elabora. Eso lo tendrán que entender los que actualmente se quejan. Esta demanda ha tenido muchísimo trabajo de apoyo al abogado, apoyo que no se ha recibido por parte de las otras dos secciones sindicales. La demanda se la hemos entregado a las otras dos secciones sindicales un día después de la reunión donde se acordó que se les iba a entregar, es decir en el mes de diciembre de 2013.

En cuanto al presente y futuro de la demanda colectiva. José Luis García Ramos estará el día 19 de febrero en los Juzgados del TSJA de Sevilla para defender a los 66 afectados, que son los perjudicados inmediatos y a quienes queremos tener lo antes posible trabajando nuevamente con nosotros.
Estamos en un momento crucial para toda la plantilla de la Base de Morón. Además del juicio por la demanda colectiva, se va a incrementar significativamente el contingente de Marines hasta un número muy cercano a los 1000, sin que en principio suponga la reincorporación de los trabajadores despedidos (de ambos ERE) ni el incremento de la plantilla en proporción y seguramente antes de la finalización de este contrato, las Fuerzas Aéreas de EEUU (USAFE) a través de VBR procederá a despedir a más trabajadores españoles.

Es un ataque frontal a nuestros derechos laborales. Respetamos las legítimas acciones sindicales de las otras dos secciones sindicales en los despachos pero creemos que ante este ataque, no podemos esperar a lo que nos digan los políticos que nos gobiernan y tienen la soberanía para resolver este gravísimo problema. O se reacciona rápidamente y se intenta movilizar a la opinión pública española o todo aquello que venimos vaticinando se cumplirá y después nos quedaremos con la cara de “gilipollas”, pero en nuestra casa y con un horizonte laboral y personal muy complicado.


¿Quién se atreve a no reconocer que esta puede ser la primera fase para desplazar a las Fuerzas Aéreas y hacer de esta base una Base de Marines autosuficientes donde los trabajadores españoles seamos totalmente prescindibles (Camp Morón en lugar de Morón Air Base…)?

1 comentario:

  1. No entreis al trapo................

    Falta poco para el juicio y estais demostrando con hechos lo que otros quieren justificar con "comunicados".

    ESTE JUICIO LO VAMOS A GANAR

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